2012 ENTRE ISMOS CONTRAPUESTOS Y EXCLUYENTES
A punto de iniciarse el curso 2012-2013, en los medios, en tertulias, en cenáculos políticos, en la calle etcétera, todo gira alrededor de la crisis, de la economía y de algunas soluciones para el otoño caliente que se avecina. Tantas cabezas, tantas soluciones. El debate está abierto y cada ciudadano es libre de opinar y echar su cuarto a espadas. Sin ninguna pretensión y como mero espectador del panorama que tenemos a la vista, doy mi opinión tan válida como la de cualquiera.
Vamos a entrar sin remedio, en la guerra de los ISMOS, al querer entendernos entre nosotros MISMOS.
Para que el 2012 no nos lleve al fatalismo, catastrofismo o victimismo, propongo lo siguiente: Ni optimismos, ni pesimismos. Ni patriotismos, ni patrioptimismos. Ni izquierdismos, ni derechismos. Ni comunismos, ni consumismos. Ni socialismos, ni rajoysmos. Ni europeismos, ni euroismos. Ni separatismos, ni nacionalismos. Ni
sindicalismos, ni pancartismos. Ni ateismos, ni agnosticismos. Ni capitalismos, ni usurerismos. Ni extremismos, ni irenismos. Ni derrotismos, ni buenismos. Ni terrorismos ni victimismos. Ni ateismos ni islamismos. Ni sincretismos, ni ecumenismos. Ni fanatismos, ni aliancismos. Ni egoísmos, ni escapismos. Ni quijotismos ni sanchopancismo .
SÍ, amigos míos, nada de lo anterior, pero cada día más cristianismo, más marianismo, más españolismo y mucho más nosotros mismos. Lo único que nos librará del ABISMO