PRETENSIÓN INAUDITA DE JESÚS.
Hace más de 21 siglos que están escritas estas palabras, que en todo el mundo cristiano han resonado en la liturgia de la eucaristía de este día -13 de julio- en el Evangelio. Seguro que a nadie que las haya oído o leído le han dejado indiferentes. Para los que no sepan a qué me refiero, las transcribo aquí textualmente: "El que quiere a su padre o a su madre más que a mí no es digno de mí; el que quiere a su hijo o a su hija más que a mí, no es digno de mí; y el que no coge su cruz y me sigue no es digno de mí". Jamás unas palabras similares a éstas fueron pronunciadas por ser humano en su sano juicio. Se le tomaría absolutamente por loco, desequilibrado o infatuado por el poder, riqueza o endiosamiento. Quizá oírle produciría hilaridad y burla. Nada de esto cabe decirse de su verdadero autor: Jesucristo. A millones de personas les han impactado de tal modo en su mente o corazón que rumiándolas, les han cambiado su vida. La conclusión lógica es: Solo Dios creador , salvador y santificador del ser humano las pudo pronunciar. Te reto amigo lector a que te contestes a ti mismo:¿ Me merecen consideración tales palabras o simplemente paso de ellas?. He aquí una de tantas inauditas pretensiones de Jesús de Nazaret. ¿Estas a favor o en contra o te resultan indiferentes?. Tu decides.
MIGUEL RIVILLA SAN MARTIN
