CHAPAPOTE EN LA CRISIS ESPAÑOLA
Por poca información que tenga cualquier español sobre la situación hodierna, en que nos hallamos, no podrá por menos que echarse las manos a la cabeza y gritar aturdido y perplejo :"¡Cómo está el patio, mama mía, con la que esta cayendo"¡ . Sin eufemismos y oteando lo que se nos viene encima - la marea negra del chapapote de la corrupción socio política - que amenaza salpicar y enfangar a incontables españoles, se busca con ahínco a cuantos han desencadenado esta debacle. "Caiga quien caiga". "Del Rey abajo, ninguno". "Todos a una como en Fuenteovejuna". El chivo expiatorio ya está a la vista. Los italianos lo dicen mejor: " ¿Piove?. ¡Porco Goberno¡".
Se da la impresión que hay, entre la casta política, quienes están interesados en sembrar la confusión, el caos sociopolítico o cargarse el sistema democrático, por aquello de " a río revuelto ganancia de pescadores". Otros pretender culpar a los demás, sin la mínima
catarsis o autocrítica de sus responsabilidades partidistas o personales. Es más, buscan presentarse como salvadores levantando toda clase de infundios, calumnias, mentiras o medias verdades, para lograr echar del poder a los elegidos en las urnas y ponerse ellos. Aquí y ahora, vale todo para lograr el poder político, social o económico, a costa de lo que sea. Se acusa al contrario sin pruebas, ni hechos contrastados y lo que priva son los prejuicios ideológicos. Mal camino el que llevamos. Al querer subir a la cima del poder, muy pocos piensan que un imparable alud de inmundicia, puede anegar a todo el pueblo español por generaciones. Este es el dilema: O nos unimos todos en una radical regeneración democrática o no habrá futuro para la marca España, que no se lo merece.
¿O tal vez, SÍ?. MIGUEL RIVILLA SAN MARTIN.