AMOR BAJO EL ESPINO BLANCO
Si hay un tema recurrente, perenne, universal y presente en todas las épocas de la Historia de la humanidad, en todas las culturas, personas y civilizaciones, así como en todas las manifestaciones humanas de las artes en piedra (arquitectura y escultura..); en papel (literatura, novela, teatro, poesía..); en celuloide e Internet (películas y videos..); este ha sido, es y seguirá siendo, sin discusión, el tema del amor y de la muerte. Difícil por no decir casi imposible, hallar a estas alturas del siglo 21, algo novedoso, original, real o imaginativo, sobre este manido tema. Pues bien, con todas las limitaciones de mi aserto, me atrevo a decir que el director chino Zhang Yimou, con actores noveles, no profesionales, ha rozado casi la perfección y originalidad en este filme, presentado a concurso en el Festival de Cine de Valladolid (2011).Su joven protagonista Zhou Dongyou mereció el premio de Mejor Actriz del certamen. Animado por el crítico de cine de la Cope, que elogió esta cinta de un modo muy especial, fui a verla y no solo no me defraudó, sino que me ha gustado sobremanera y la recomiendo muy mucho a los adolescentes y jóvenes que inician sus relaciones amorosas. Algo muy especial tiene este filme –sobre un hecho real, ocurrido en la Revolución cultural de Mao- que logró que gran parte del público saliéramos con los ojos húmedos y el pañuelo en las manos.
En un mundo y en una sociedad supererotizados, donde el sexo y la carnalidad privan al máximo, en la mayor parte de las producciones "artísticas" hodiernas, es de elogiar la sensibilidad, pureza y delicadeza, con que este realizador oriental, ha hecho como se propuso una película sobre el amor juvenil que fuese "fresca y pura". A fe mía que lo ha logrado con creces. Recomendable para toda persona sensible de cualquier edad.
